The text talks about “preventive” missions in the ongoing conflict in the region, with numerous cargo ships and oil tankers targeted by the faction. Ukrainian successes in the Black Sea against the Russian fleet have been attributed to these tactics.
The movement, supported by Iran, was among the first to develop unmanned vessels. Different models have been created using common boats, custom-built vessels, or obtained through the Iranian supply chain.
The simpler ones have one or two 200-horsepower engines, a warhead made from anti-ship missiles, or plastic explosives. Recent versions have warheads ranging from 150 to 500 kilograms and can reach maximum speeds of 40-50 knots.
They become extremely dangerous when used in “swarms,” a large number remotely guided to overwhelm the target’s defenses, such as machine guns and rapid-fire cannons. The crisis in the Arabian Peninsula has become a testing ground for operations where terrorists and guerrillas have relied on raids to engage enemies.
In the past, the militants transformed a motorboat into a bomb piloted by a kamikaze, successfully damaging the US warship Cole and a French oil tanker. The Houthi victories have led to the expansion of their arsenal with the assistance of the Pasdaran, who have long developed this particular naval sector.
Some experts draw parallels between these vessels and those used by the Tamil Tigers, while others see inspiration from the boats utilized by Italians or Japanese during WWII. US intelligence reports suggest that the Yemeni faction has dozens of maritime vessels and drones scattered across various ports.
El texto habla sobre misiones “preventivas” en el conflicto en curso en la región, con numerosos barcos de carga y petroleros siendo atacados por la facción. Se les atribuyen éxitos ucranianos en el Mar Negro contra la flota rusa gracias a estas tácticas.
El movimiento, apoyado por Irán, fue uno de los primeros en desarrollar embarcaciones no tripuladas. Se han creado diferentes modelos utilizando barcos comunes, embarcaciones hechas a medida u obtenidas a través de la cadena de suministro iraní.
Las versiones más simples tienen uno o dos motores de 200 caballos de fuerza, una ojiva hecha de misiles antibuque o explosivos plásticos. Las versiones recientes tienen ojivas que van desde 150 hasta 500 kilogramos y pueden alcanzar velocidades máximas de 40-50 nudos.
Se vuelven extremadamente peligrosos cuando se usan en “enjambres”, es decir, un gran número guiado a distancia para abrumar las defensas del objetivo, como ametralladoras y cañones de disparo rápido. La crisis en la Península Arábiga se ha convertido en un campo de pruebas para operaciones en las que terroristas y guerrilleros han confiado en incursiones para enfrentar a los enemigos.
En el pasado, los militantes transformaron una lancha motora en una bomba pilotada por un kamikaze, dañando con éxito el buque de guerra estadounidense Cole y un petrolero francés. Las victorias de los houthis han llevado a la expansión de su arsenal con la asistencia de los Pasdaran, quienes durante mucho tiempo han desarrollado este sector naval particular.
Algunos expertos establecen paralelismos entre estas embarcaciones y las utilizadas por los Tigres Tamiles, mientras que otros ven inspiración en los barcos utilizados por italianos o japoneses durante la Segunda Guerra Mundial. Informes de inteligencia estadounidenses sugieren que la facción yemení tiene docenas de embarcaciones marítimas y drones dispersos en varios puertos.